HORIE TAKU

Biodatos >> Nacido en la ciudad de Kudamatsu (prefectura de Yamaguchi) el 14 de marzo de 1925 y fallecido el 8 de febrero de 2007. En 1956 debuta como dibujante en la revista Tsûkai Book con la historia "Dekanshi-kun". Horie continúa varios años en la revista para la que realiza series cada vez más exitosas, culminándose su carrera en 1960 cuando dos de sus series más populares, "Hood Tsubakuro" y "Pegasus of the Tempyô Era" son convertidas en series de TV. Otras obras de este autor son "Hammer Kit", "Blue Jet", "Boy Harimao", "Ganking", "Solar Mask", "Spy Catcher J3", "Boy Hurricane" y "Red Pinwheel".

"YAGURUMA KENNOSUKE"
("Arrow Wheel Kennosuke")
矢車剣之助
por Horie Taku.
serializada en el Shônen (Kôbunsha). [1959/02] [1960/12]
género: chanbara.
Interesante perspectiva novedosa en el tratamiento de una serie de base argumental aparentemente del montón, con el típico joven héroe espadachín (cuyo rasgo distintivo es una media luna marcada en la frente) enfrentado a un clan rival que sabe todo tipo de triquiñuelas. Aún dejando aparte el siempre notable sentido del ritmo del autor, que en esta ocasión parece apostar más por el suspense y los golpes de efecto, muy bien planificados por cierto, la serie tiene una ambientación muy cuidada y siempre buscando la innovación, con lo que muchas veces la misma se apodera del protagonismo de la trama. Los personajes secundarios están muy bien perfilados, robándole la plana al propio Kennosuke en más de una ocasión. Todos estos elementos elevan sustancialmente la historia haciéndola muy sugestiva y apasionante de seguir. Un gran éxito del autor.
Este manga se convirtió en serie de TV en 1960, dirigida por Arai Taishi y Nakamura Jun'ichi y con Yaguruma Kennosuke encarnado por Tezuka Shigeo.

''BURUU JETTO''
(''Blue Jet'')
ブルージェット
por Horie Taku.
serializada en el Shônen Book (Shûeisha). [1960/01]
género: aventuras
Espectacular serie de aventuras que juega con habilidad con todos los clichés del género siempre dentro de una óptica de magnificencia, con cientos de extras, elefantes y hasta tanques de combate. Como era habitual en la época la serie basa gran parte de su atractivo en el exotismo, circunscribiendo la acción al continente africano y con su protagonista tocado con turbante hindú (cuyo símbolo es un jet azul) y pañuelo ocultándole la boca. Se hace llamar "Blue Jet", viste como un explorador occidental y oculta su verdadera personalidad casi sin necesidad alguna, sobre todo para rodearse de un halo de misterio. Pero la personalidad de nuestro héroe es prácticamente lo de menos, ya que la mejor baza con la que juega el autor son las luchas sin cuartel entre éste y su comando de encapuchados contra todo un ejército nazi aliado con un chiflado con ansia de dominar África. El tono es siempre aparatoso pero muy dinámico, donde Horie oculta algunas deficiencias del dibujo con un proverbial sentido de la aventura pura.

''SHÔNEN HOOKU''
(''Boy Hawk'')
少年ホーク
por Horie Taku (también bajo pseudónimo) 
serializada en el Shônen Book (Shûeisha). [1960/01]
género: aventuras
Segunda serie del autor publicada en el mismo mensuario al mismo tiempo. Una vez más, su premisa es la espectacularidad aunque aquí Horie parece apostar más por la mezcla de géneros juveniles más dispares a fin de atraer el mayor número de lectores posible. Su estrella es un joven piloto de un "jet" de combate cargado de gadgets que se hace llamar "Halcón" y cuya principal ocupación consiste en hacer frente a las más audaces mentes criminales del planeta. En esta ocasión el piloto se las vé con rivales de su talla, tanto física como intelectual, forzándose logrados duelos tan emocionantes como atractivos. El dibujante se encuentra en todo momento a la altura de las circunstancias, jugando como siempre con la carta de la aparatosidad y la acción más dinámica.

"TORIKKU NO MATAICHI"
(''Mataichi's Trick'')
仕掛の又一
por Horie Taku.
serializada en el Shûkan Shônen King (Shônengahôsha). [1975/10/13]
género: aventuras
Otra estupenda serie de aventuras y ciencia-ficción a manos de un artistazo que a sus 50 años y pese a haber pasado su época de gloria, aún daba muestras de ser uno de los mayores especialistas en el género y de haber sabido adaptarse perfectamente al nuevo lenguaje del género que estaba formalizándose durante esta década. La base no es muy novedosa, la de un chaval convertido en agente secreto que utiliza como gadgets botas con patines, yo-yos de acero con cadenas y garfios en lugar de armas de fuego, y que se enfrenta a una poderosa organización paramilitar motorizada formada por acróbatas y otros raros especímenes. La serie es puro circo, pero con un grafismo de gran calidad plástica que juega brillantemente con las trepidantes escenas de acción donde cada "lance" da paso a otro cada vez más emocionante e imaginativo, sin tiempo a respirar casi. Nuestro héroe está algo alejado de los tópicos de este tipo de series; ciertamente es un chaval arriesgado, valiente e inteligente, pero eso no le quita pasarlas canutas durante sus misiones, pues le vemos sudar, recibir algunos palos, aceptar que sus planes no salgan según lo previsto, y desde luego sonreir bastante poco. Por desgracia no duró lo deseado.