NAKAHARA CHIZUKA

Autora Shôgakukan, activa entre finales de los 70 y principios de los 80, especialmente para el Shocomi. Su serie más importante es "Naomi", publicada en esa revista a partir de 1980. Otras obras: "Pure Heart Instrumental Duo", "Goodbye Kid" y "I-Think-So".

"JUNJÔ NI JÛZÔ"
("Pure Heart Instrumental Duo")
純情二重奏
por Nakahara Chizuka.
serializada en el Shûkan Shôjo Comic (Shôgakukan). [19790920]
género: comedia romántica.
Primer éxito de Nakahara, cultivando su propio estilo narrativo entre ingenuo y sensible. No es ninguna maravilla, pero pone de manifiesto una autora interesante, con un dibujo estándar, que parece mezclar elementos de manga para doceañeras, caracterizados por el kawaii, la simpatía del personaje protagonista, etc., con otros más graves. El difícil equilibrio se consigue casi siempre, lo que es un mérito realmente aceptable, aunque es indudable que la operación podría haberse mejorado. A grandes rasgos, la historia se centra en la difícil relación entre dos jóvenes, Kaoru y Shûhei, que se han criado juntos desde muy pequeños, y ahora, llegada la adolescencia, diversos elementos a su alrededor se conjugan para romper y volver a unir su relación; entre ellos destaca Takeshita, un joven un poco mayor que Shûhei, de más experiencia y por supuesto tacto, al que la inocente Kaoru admira y respeta como si fuera un adulto, lo que provoca los celos de Shûhei, claro. Las relaciones de la pareja quedan complementadas con las de sus respectivos padres, que al igual que sucede con el argumento principal, varían entre la comedia exageradamente kawaii y el tono más solemne.

"AI SHINKU SÔ"
("I Think So")
あい・しんく・そう
por Nakahara Chizuka.
serializada en el Shûkan Shôjo Comic (Shôgakukan). [19820605]
género: comedia romántica.

Miyamoto Saki y Harada Satoru son la típica parejita de colegiales de instituto que se sienten atraidos el uno por el otro pero no se atreven a mostrarse abiertamente entre ellos. A través de las diversas etapas de su aprendizaje escolar, una y otra vez, el destino mueve su mano poderosa para intentar unirlos, pero al mismo tiempo, siempre por razones inesperadas o que no vienen al caso, este principio de idilio se rompe de manera hilarante. Saki, la protagonista, es una buena chica, de carácter simpático pero algo introvertido, lo que parece encajar también perfectamente con la manera de ser de Satoru. Ella narra los episodios en primera persona en una especie de diario secreto con cierto tono de nostalgia; estos van divididos por sketches de unas cuantas páginas, que se van uniendo para formar una historia. El argumento, como el dibujo, es simpático y agradable pero a la vez inocuo, no llega a trascender porque se queda en la mera anécdota. Los diseños están bien, se nota cierta madurez pero al mismo tiempo una planificación un poco sosilla que no les hace justicia. Es de estos productos a los que le falta un acabado final. (Santxe)