Pequeños apuntes biográficos de mangakas de los años 1950-1995 con breves reseñas de algunas de sus obras.
jueves, 23 de julio de 2015
TOMISAWA CHINATSU
Biodatos >> Nació el 10 de enero de 1959 en Fukaura, Nishitsugaru (prefectura de Aomori). Entra en el manga como asistente en jefe de Akimoto Osamu en su serie "Kochikame", Aro Hiroshi y Usune Masatoshi. Se especializó en historietas cómicas y cómico-eróticas. Entre sus trabajos, destacan "Please, Sapuriman (My Pure Lady)", "Pi Cat Women's Dormitory", "Dinosaur Girl Little Terano", "Katsushika Q", "Ponkotsu 19" y "Fun's Goldfish", llevada a la TV en 1996, y especialmente "Teyandei Baby" llevada a la pequeña pantalla en 1996 y 2008.
Para saber más: http://users.skynet.be/mangaguide/mangap.html
"KATSUSHIKA Q"
葛飾Q
por Tomisawa Chinatsu.
serializada en el Big Comic Superior (Shôgakukan). [1989/19/15] [1991/08/01]
género: comedia animales.
Una interesante rareza que hará las delicias de los amantes del humor absurdo, no sólo porque el autor ha sabido hilvanar una serie de historias relacionadas con animales de un modo bastante ingenioso —de manera que sabe extraer todas las posibilidades de cualquiera de las que compone su recopilatorio, llevándolas magistralmente al extremo justo de su distorsión— sino porque además va acompañada de un dibujo brillante, muy cuidado en los diseños pero sin abusar, lo que da al conjunto un cierto tono algo más realista de lo habitual en este subgénero que a la postre refuerza todavía más los gags. Esta serie se desarrolló a través de diversas etapas a lo largo de los años. En la primera, estaba compuesta de historias autoconclusivas de personajes muy variados, que de un modo u otro tienen un animal a su lado, y no sólo mascotas domésticas precisamente... Más tarde hace su aparición una comunidad de pingüinos que toma el protagonismo de la serie. Su protagonista soporta varias desventuras, cada vez más barrocas, y debe luchar por la chica que ama. El autor iba quemando cartuchos y cuando veía que el tema se agotaba, volvía a empezar de cero. La revista era muy consciente de las posibilidades del autor y puso a su servicio las páginas centrales bitono, que Tomisawa supo aprovechar. Definitivamente, uno de los mejores mangas en su género.
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