NAKAJIMA TÔRU

 

Biodatos >>  Nace en la ciudad de Yokohama, prefectura de Kanagawa, el 11 de julio de 1963. Debuta en 1986 con la historia "Twisting the Upper Body of Love" para el Shônen Sunday Special, y desde entonces se mantiene fiel a su editorial. Al año siguiente inicia en la revista su primera serie, "Skilled Mah-Jongg Player Higashi", que será también su primer éxito, seguido de otro aún mayor, "Professional Monologue" en el Big Comic Original a partir de 1988. Otros trabajos: "Gambling Prince Storm", "Properly Gunbai!" y "Fight, Little Green Beret!". Muere en 2011 de un cáncer a la edad de 47 años, dejando inconclusa "Everyone Is Professional". 

"SHÔNEN JYANKI HIGASHI"
("Skilled Mah-Jongg Player Higashi")
少年雀鬼-東-
por Nakajima Tôru.
serializada en el Shônen Sunday Zôkan (Shôgakukan). [198801]   
género: comedia mah-jongg.
Parodia de los mangas de mah-jongg dirigida al ámbito juvenil, lo que no deja de ser curioso ya que este subgénero se ha prodigado muy poco por este tipo de revistas. Su protagonista es el joven Higashi, un chaval que procede de una tradición de jugadores de mah-jongg, siendo su abuelo un legendario experto. Bajo la atenta supervisión del anciano, Higashi se ha ido convirtiendo en un brillante jugador también. A su alrededor, siempre se presenta la oportunidad de batirse con algún contrincante habilidoso, pero al contrario de lo que pasa en los mangas para adultos, no se trata de ningún campeón real de este juego, sino de animales amaestrados, figuras históricas que vuelven a la vida, personajes de los cuentos de hadas o del imaginario popular, etc. Todos ellos tienen sus trucos personales que a su vez, están basados en momentos de su vida o de su propia condición, y que ponen hábilmente en contra de Higashi. Es aquí cuando el chaval contraataca con una serie de movimientos más propios de una revista "kodomo". Todo ello siempre desde un prisma humorístico logrado sólo en algunas ocasiones. El conjunto es por lo general correcto, pero le falta algo de lustre. Sea como fuere, tiene cierto interés y denota la capacidad futura del autor. 

"MINAMI BAIAN SHÔBU ROKU - PURO NO HITORI-GOTO"
("Minami Baian Match Record - Professional Monologue")
南倍南勝負録 玄人のひとりごと
por Nakajima Tôru.
serializada en el Big Comic Original (Shôgakukan). [19910805] [19930205]   
género: comedia.
Minami Baian es un treintañero que viste y se comporta a la antigua usanza: va con kimono y sandalias a todas partes, lleva el pelo muy largo y siempre adopta una postura reflexiva y estoica. Presume de dominar todos los campos, desde el mah-jongg a la pesca, pasando por la psicología de sus interlocutores, pero en realidad, Minami es todo apariencia. Realmente es un hombre inteligente y tiene recursos para salir de casi todos los apuros, pero no es un maestro de nada, y menos aún en temas de juego. Como si la vida fuera un gran tablero, nuestro protagonista se dedica constantemente a "farolear" con actitud superior hacia los demás. A pesar de su carácter casi antipático, este personaje cayó muy bien entre los lectores del quincenal, y a pesar de su evidente formato ligero de "serie humorística de relleno", con sketches de pocas páginas, la obra fue manteniéndose en la publicación durante más de un decenio. Es un producto sencillo y al mismo tiempo compacto.

"GYANBURU ÔJI ARASHI"
("Gamble Prince Storm")
ギャンブル王子嵐
por Nakajima Tôru.
serializada en el Shônen Sunday Zôkan (Shôgakukan). [19910915]   
género: comedia juego.
Tras la cancelación de "Skilled Mah-Jongg Player Higashi", Nakajima presentó en la revista un proyecto parecido pero en el que se acentuaron los errores y defectos en general de la serie anterior, que por lo visto fueron precisamente los que inspiraron su éxito. El caso es que el nuevo producto tuvo una tirada bastante similar, así que es de suponer que la fórmula debía ser correcta. Nuestro nuevo protagonista, Tobo Arashi (Tormenta), es otro chaval experto en el juego, pero ahora en el ámbito del poker. Sin embargo, realmente las cartas ocupan un puesto un tanto marginal en esta serie, y de hecho hay episodios en los que ni siquiera se juega una miserable partidita. El autor prefiere centrarse en la interacción entre el protagonista y los demás personajes secundarios, desde el rival igual de taponil pero mejor vestido, la chica, el tipo con pinta de mafioso, y una serie de estereotipos humorísticos habituales de este tipo de productos. Los gags, breves, fluyen casi a trompicones, de manera tremendamente lineal y poco atractiva. El resultado es un gran guiñol sin más.