NOYA YUKIO

Según el Shônen Champion, debutó en 1974 y su primera serie "oficial" es "Naughty Jockey" por esas mismas fechas en la propia revista. Al año siguiente publicó en el Power Comic "Fly Out, Ichizen!!" con guión de Sasaki Mamoru. Su serie más importante (por no decir la única importante) es la beisbolera "Oss, Hard Work!" serializada en el Shônen King a finales de la década.

"WANPAKU JOKKII"
("Naughty Jockey")
わんぱくジョッキー
por Noya Yukio.
argumento de Arai Masanobu.
serializada en el Shûkan Shônen Champion (Akita Shoten). [19740520]
género: hípica biográfica.

Adaptación bastante libre de la novela de Arai "Risked Gambler", que era una biografía del popular "jockey" de los años 60 y 70 Kaga Takemi, toda una leyenda entre los amantes de los caballos de aquellos años. Noya realiza una adaptación lógicamente juvenil de la historia, y para ello empieza la narración en su Wakayama natal a principios de los años 50, cuando el chaval abandona junto a su padre por primera vez el pueblo donde se ha criado con destino a la gran ciudad. Takemi es un chaval despierto a pesar de su ingenuidad, muy extrovertido, no le tiene miedo al trabajo duro pues no conoce otra vida que la del campo, y gracias a ella sabe tratar a los caballos. Esta experiencia le va a servir en el futuro cuando se convierta en un prestigioso jinete de carreras. A pesar de ser un trabajo algo primerizo, y de ciertos problemas con la falta de asistentes que le obligan a economizar algunos detalles, el dibujante hace un trabajo bastante potable. Los diseños son los típicos de este tipo de series juveniles, y aunque no están a la altura de los grandes maestros del momento, de vez en cuando Noya nos obsequia con algunos planos bastante inspirados. A pesar de sus referencias, la serie no tuvo el éxito esperado. 

"TOBIDASE!! ICHIZEN"
("Fly Out, Ichizen!!")
とびだせ!!イチゼン
por Noya Yukio.
escrita por Sasaki Mamoru.
serializada en el Shûkan Power Comic (Futabasha). [19750725]
género: comedia.

Producto prefabricado infantil —de los varios que hubo en la revista, y que chocaba un poco con el tono general de la misma— protagonizada por un grupo de chavalines liderado por Ichizen, cuya seña distintiva es una típica gorra rota característica de los colegiales mas bien rebeldes y su carácter abierto, extrovertido y siempre dispuesto a hacer travesuras, en su mayoría con cierta mala leche, pero siempre dentro de unos límites estrictamente infantiles, sin cargar tampoco las tintas, porque en el fondo, muy en el fondo, es un chaval sensible. Sus historias son sencillas y tienen cierta gracia aunque el guionista podría haberlas afinado un poco más. El dibujo de Noya, bien madurado, adecuado al tema y correcto por todas partes, en algunos diseños llega a recordar al de los mismísimos hermanos Chiba, lo que induce a pensar si a principios de la década pudo haber trabajado como asistentes de alguno de los dos. El semanario intentó promocionar esta serie pero parece que no llegó a cuajar.