Pequeños apuntes biográficos de mangakas de los años 1950-1995 con breves reseñas de algunas de sus obras.
jueves, 25 de julio de 2019
ISHIYAMA TÔKICHI
Biodatos >> Nació el 23 de septiembre de 1960 en la ciudad de Ôita. Tras graduarse en la Universidad de Arte de Ôsaka, empezó a trabajar como asistente en esta ciudad, hasta que finalmente se trasladó a Tôkyô donde acabó como jefe de asistentes de Kurumada Masami, del que heredó su estilo. Debutó oficialmente en 1986 con la serie "Fighting God Site" en el Shônen Champion. Al año siguiente apareció en su franquicia mensual su primer éxito, "Chicken Club", a la que siguieron "Map", "Danki", "Karaji Shibotan", "Jan Jan Bari Bari", etc., antes de convertirse en free-lance a partir de 1999. De esta segunda etapa destaca especialmente su personaje "Little Toki" para el mercado adulto.
"MAPPII"
("Map")
マッピィ
por Ishiyama Tôkichi.
serializada en el Shûkan Shônen Champion (Akita Shoten). [19881209]
género: acción.
Este producto es uno de los varios que sacó el autor copiando el estilo y la puesta en escena de su maestro Kurumada y, todo hay que decirlo, sin ser ninguna maravilla le supera en todos los aspectos. No sólo ha sabido absorber su personal mundo de violencia reiterativa y sus típicos momentos efectistas enfatizados al máximo, sino que, sencillamente, su dibujo es mejor, tanto en lo que se refiere a los diseños, mucho menos rígidos y mejor abocetados, como en un diseño de producción bien amueblado y razonablemente atractivo. La historia es lo de menos, pues se trata de la típica serie con estudiante de instituto bien parecido con bastante habilidad con los puños, que responde al nombre de Matsuda, y que se ve obligado a utilizarlos contra estudiantes de institutos rivales cada vez más fuertes y dotados de mejores técnicas, hasta que entra en un nivel de guerreros, digamos, de club de élite y habilidades casi sobrenaturales. Poco a poco el carácter simpático y amistoso del protagonista se irá volviendo rudo y casi hierático. En el fondo, es el típico argumento parecido al de cualquier videojuego corriente y moliente y su interés es muy relativo, pero sirve para que veamos lo que pasaría si Kurumada fuera un buen dibujante.
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