MUTSU EIKO

Biodatos >> Nació en la ciudad de Iizuka (prefectura de Fukuoka) el 15 de febrero de 1954 y en 1973 debutó en un número especial de otoño del Ribbon (revista con la que fichará casi en exclusiva hasta 1990) con la historia "Shishi-za Umare no Anata-sama" y su primera serie importante apareció en 1975, "I Found It in the Twilight". Años después se pasó a las "ladies", primeramente a las de la misma editorial, Young You y You, antes de convertirse en "free-lance". Su trabajo más importante es una adaptación de "Alice in Wonderland", iniciada en 1983. Otros trabajos de su primera etapa: "François of Konpei Mansion" (que tuvo una secuela), "Black-Brown Romance", "Shooting Star Paradise", "Saturday Afternoon Cheerful Tearful", etc., y de la segunda: "Harper's Secret", "Dahlia of Memory", "Paper Moon", "Looking for Darling", "PC Cafe", "Persimmon's Dream", "Saturday in Love", etc. Su nombre también se puede transcribir como "Mutsu Ako".
Para saber más: http://users.skynet.be/mangaguide/mangap.html.  

"KONPEISÔ NO FURANSOWA"
("François of Konpei Mansion")
こんぺい荘のフランソワ
por Mutsu Eiko. 
serializada en el Ribbon (Shûeisha). [198105]
género: comedia romántica. 

Típica comedieta sentimental de tono alegre y tintes autobiográficos sobre una joven dibujante llamada Rakuko que aspira a convertirse en ilustradora profesional de cuentos de hadas occidentales y vive en un típico edificio de apartamentos de la capital llamado "Konpei" (que debe ser uno de esos juegos de palabras intraducibles), teniendo como vecinos a una pareja madurita que casi se han convertido en sus confidentes. Rakuko realiza trabajos para Shigeru, joven editor cuya pequeña empresa está al borde de la quiebra. La pareja tiene una cierta amistad que poco a poco va dando paso a algo más personal que una relación subalterno-jefe. Quizá proyectando los anhelos de la propia dibujante, nuestra protagonista es simpática, soñadora, positiva y activa, y para el algo atribulado Shigeru ella representa una bocanada de aire fresco. El desarrollo de la historia es tan previsible que hace que sea más agradable el tono general logrado que el propio argumento, con su ritmo sencillo y algo falto de chispa. El dibujo es bastante plano, con unos diseños inocuos dentro de una puesta en escena algo infantil y poco depurada. Este aire minimalista tiene cierto atractivo pero a la postre es insuficiente para levantar el interés del lector.